De Amanda by Eva S.G. Me senté en el cojín y vi que García ponía una silla y se sentaba exactamente afuera de la celda. Note que se puso unos audífonos y su celular del bolsillo. Amanda mirándome de frente y con un tono más agresivo me dice – Dame la comida, a ver que fue lo que trajiste. –
Yo en cambio, me acomodo en mi posición, la miré con serenidad y compasión, le respondí - Primero vamos a hacer la meditación, enfocándonos en la respiración, después de hacerlo te podre dar la comida. Ese fue el acuerdo. –
Exploto en ira, - Calva desgraciada, no estas aquí para que yo te sirva, estas aquí porque yo así lo decidí y sí se me da la gana, te podría hacer sacar de esta guarida. Dame la maldita comida, ¡Ahora! Es la única razón por la cual me aguanto tu presencia y estas aquí. - Me escupió, en un par de ocasiones. Cada vez que me negaba a darle lo que quería seguía insultándome. Era tanta su ira porque no recibía lo que quería, que ni siquiera se había percatado que, a pesar de sus gritos, nadie se movía. Yo sentada en mi cojín, permanecía quieta, solamente la observaba, seguía en actitud compasiva, observaba como en ese cuerpo la ira se movía porque no se complacía. Mientras me insultaba, yo me preguntaba de donde sale tanto vocabulario para proferir adjetivos negativos, imagino que la misma riqueza permitiría positivos. Luego un poco más calmadamente. Lo primero que tomo fue la taza de café, no la bebió, solo la olía, y respiraba profundo para quedarse con el olor. Luego abrió lo demás y comió lo que pudo con las manos, solo un poco, y lo demás en cuanto nos descuidamos, me lo tiro en la cara. García intento golpearla, pero alcance a interponerme, entonces se detuvo. Le di a entender, que había sido descuido mío, no la mire a los ojos, recogí la comida regada, los restos, y empaque todas mis cosas.
Antes de irme, la mire con toda la compasión que me salía del corazón, ella sufre y su ira la hace ignorante, por eso reacciona así. Ella no sabe que la comida no tiene ninguna culpa en lo que le pasa, cuando ella no entiende que arrojándome comida no me hace ningún daño. #vipassana #macondo